El Ayuntamiento de Plasencia ha puesto en marcha un ambicioso proyecto de digitalización de las Actas Capitulares del Archivo Municipal, con el objetivo de garantizar su conservación y facilitar su consulta. La iniciativa, desarrollada en colaboración con la empresa especializada VINFRA, abarcará en esta primera fase unos 65 libros que comprenden desde el año 1580 hasta 1720.
“Se trata de una de las fuentes documentales más valiosas para conocer la historia de Plasencia”, ha destacado María Luisa Bermejo, concejala de Cultura, durante la rueda de prensa celebrada esta mañana. “Estas actas recogen decisiones de los plenos municipales y nos permiten reconstruir la vida social, económica y administrativa de la ciudad”.
Hasta ahora solo se habían digitalizado tres volúmenes: los correspondientes a los años 1465, 1481 y 1522-1526. Con este nuevo impulso, el Archivo pretende avanzar en la digitalización de los 220 libros anteriores al siglo XX y colgarlos progresivamente en su página web oficial.
María Jesús Cámara, archivera municipal, ha subrayado la importancia de esta labor: “La digitalización permite dejar de manipular los documentos originales, lo que reduce su deterioro. Además, actúa como medida de seguridad ante posibles desastres, ya que se generan copias de conservación y difusión”.
El proceso de digitalización incluye la reproducción íntegra de los documentos: cubiertas, lomos, páginas en blanco y texto completo. Las imágenes se almacenan en formato TIFF como máster, y también se generan versiones en JPG y PDF para su consulta online.
Mario Hernández, operador de escáner de VINFRA, encargado de realizar el trabajo, ha señalado que “la documentación está en sorprendentemente buen estado para su antigüedad” y que ya se ha alcanzado aproximadamente la mitad del proyecto. “Se trata de un trabajo minucioso, donde se revisa cada imagen para asegurar que sea fiel al original”, ha añadido.
Las actas estarán disponibles en el repositorio del Archivo Municipal y podrán consultarse desde cualquier parte del mundo. Además de preservar el patrimonio documental, este proyecto impulsa la investigación histórica. “Muchos investigadores utilizan estas fuentes. La paleografía es clave para descifrarlas, pero ahora será mucho más fácil acceder a ellas sin necesidad de tocar los originales”, ha concluido Cámara.
Desde el Ayuntamiento se ha expresado la voluntad de continuar con nuevas fases de digitalización en los próximos años hasta completar el fondo histórico.